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lunes, 5 de septiembre de 2011

Trabajando con el Estado Venezolano

Artículo escrito por el Lic. Andrés Rojas Jiménes
Publicado en el diario "El Nacional" de hoy 05 de Septiembre de 2011

Un contratista de cualquiera de las obras eléctricas que se construyen en el país debe fragmentar su factura hasta en seis organismos a la hora de cobrar. Petróleos de Venezuela, el Banco de Desarrollo Económico Social de Venezuela, la Corporación Eléctrica Nacional, el Fondo de Desarrollo Nacional, el Fondo de Cooperación y el Fondo Conjunto Chino Venezolano aparecen involucrados al momento de pagar por cualquier proyecto de generación o transmisión. A esta traba burocrática, reconocida por la unidad de control de Corpoelec, se agrega que algunos de los organismos vinculados al plan de inversiones del sector eléctrico registran retrasos no inferiores a 10 meses en promedio en los pagos a las empresas a las que les adjudicaron las obras.
El Bandes, el Fonden y el Fondo Chino figuran entre los entes oficiales con mayor acumulación de facturas, que en algunos casos llega a un año, en ocasiones porque no se disponen de los recursos de manera inmediata o son otras las prioridades, y en otros porque las facturas deben ser revisadas y avaladas por los equipos técnicos de estos entes, que tienen en común que están bajo la tutela del Ministerio de Planificación y Finanzas.
Pdvsa también figura con retrasos al tomar en cuenta que parte de las obras eléctricas fueron contratadas por la petrolera y parte de su competencia no fue transferida.
Los desembolsos a los contratistas se agilizan con mayor celeridad cuando se determina que el ordenador de pago debe ser Corpoelec, sobre todo cuando depende de técnicos de Edelca, Enelven y la Electricidad de Caracas, pero las insuficiencias presupuestarias de estas filiales, que fueron fusionadas en una corporación, impiden que siempre se pueda cumplir directamente y de allí que se recurra a otros organismos del Estado.
Una de las consecuencias inmediatas, según advierte la unidad de control de Corpoelec, es el incremento en los costos laborales, porque el personal contratado no se puede mover hasta que no se concluya la obra y en casi todos los proyectos existe un retraso de entre 12 y 18 meses con respecto al plan presentado en 2009.
Las principales obras de generación de electricidad que se realizan, y que se espera concluyan este año o el próximo, afrontan retrasos en los pagos a contratistas porque dependen de diferentes ordenadores de pago.
Las situaciones más críticas con relación a los pagos a contratistas se registran con varias obras de generación prometidas para 2011 y 2012, como Termozulia, modernización y rehabilitación de Planta Centro, La Raisa, El Sitio, El Vigía, La Cabrera. También con el complejo hidroeléctrico Fabricio Ojeda o La Vueltosa en el estado Táchira.
Igual situación se presenta en el área de transmisión con la ampliación de la red de Macagua, instalación de El Furrial, sistema San Gerónimo-Cabruta, plan de interconexión en Falcón, y las subestaciones de transmisión como Palital, Danto y Los Andes.
La deuda laboral. Corpoelec y el Ministerio de Energía Eléctrica, por otro lado, están bajo el escrutinio del sector laboral porque requieren constantemente de recursos para pagar la nómina.
Un ejemplo del déficit de ambos organismos se vio la semana pasada cuando estos despachos solicitaron al Ejecutivo nacional la aprobación de recursos por 1,4 millardos de bolívares para cumplir con obligaciones laborales, hecho por Alí Rodríguez Araque en su doble rol de ministro de Energía Eléctrica y presidente de Corpoelec.
Un tramo de la solicitud incluyó al Fonden y apenas demoró 8 días hábiles, porque era para honrar pagos a los trabajadores, quienes habían iniciado movilizaciones por incumplimiento en la convención colectiva.
No obstante, otra parte debe esperar 30 días porque se trata de un crédito adicional que se introduce ante la Oficina Nacional de Presupuesto. La petición debe ser revisada, evaluada y sólo se le da curso cuando la tesorería nacional certifique la fuente de financiamiento.
Posteriormente el crédito debe ser aprobado por el Consejo de Ministros y por la Asamblea Nacional, donde es discutida en la Comisión de Finanzas como en la plenaria, como pasos previos para ser devuelto al Ejecutivo nacional.